(o la grandeza de las pequeñas cosas)
Porque pequeñas cosas que suceden pueden tener un efecto increíble.
Hay semanas en las que se acumulan unas cuantas de esas pequeñas cosas y cuando llega el finde uno toma plena consciencia de su valor, tanto individual como conjunto. Y sobretodo sentirse valorado y apreciado, y poder hablar con las personas y compartir sus problemas, sus luchas, sus triunfos y sus alegrías. Y también poder acompañarlas y apoyarlas. De todos esos pequeños momentos, cada uno ya un tesoro en sí, sale algo grande. Hace que uno se sienta bien. No sucede muy a menudo, pero cuando sucede es genial.
(Recordad, es viernes por la noche y el cansancio de la semana hace mella, así que si no entendéis nada de esta filosofada, no hagáis caso, juas juas juas juas, XD ^^).
"Ni límites ni fronteras, extranjero soy
Porque allá donde voy me llaman el extranjero
Dónde quiera que estoy el extranjero me siento"